Inventario de los bienes
que quedaron por muerte
de doña Mariana Gómez
Salinas, mujer que fue de don
Lope de Arbursea
En la ciudad de Málaga,
en veinte y siete días del mes
de abril de mil y
setecientos años, ante mí el
escribano y testigos pareció
Manuel Ruiz de Sensano,
vecino de esta ciudad a quien doy fe conozco, y
dijo: que doña Mariana Gómez Salinas vecina que fue
de esta dicha ciudad y mujer legítima de don Lope de
Arbursea, falleció y pasó de esta presente vida
el día diez de este presente mes; y por el poder
que la susodicha otorgó ante mí el escribano
en tres de este dicho mes a el dicho don Lope de Arburse
su marido; instituyó al otorgante por ser
heredero universal cuya herencia el otorgante
desde luego acepta con beneficio de inventario;
y para que en todo tiempo conste los bienes
que han quedado por dicha fin y muerte,
hace inventario de ellos en la forma
y manera siguiente:
Primeramente, una cama de pino con su
colgadera de brocatel.
Cuatro colchones con su lana.
Cuatro sábanas de morlés.
Tres almohadas con sus henchimientos de lana.
Tres acericos con su lana
Una pollera de carro de oro.
Un manto de seda.
Un guardapiés de brocado.
Otro de sarga, tinta en grana.
Un casaca de mujer de brocado.
Dos jubones de tafetán doble.
Un delantal de tafetán sencillo.
Un jubón de felpa.
Tres camisas usadas.
Dos cofres de vaqueta de moscovia.
Otros dos cofres de vaqueta negra.
Ocho sillas de vaqueta de moscovia.
Ocho almohadas de felpa encarnada.
Ocho países.
Un retrato de el cardenal Zapata.
Otro cuadro de las Bodas de Caná de galilea.
Un cuadro de Nuestra Señora de la Soledad.
Un dosel con su crucifijo.
Otro cuadro de Nuestra Señora de Belén.
Otro de san Antonio de Padua.
Otro de la Visitación de Nuestra Señora.
Un cuadro eccehomo.
Otro de un niño Jesús dormido.
Cinco cuadros de los cinco sentidos.
Un escritorio de nogal con su pie.
Otro pequeño negro.
Un merendero de brocatel.
Un bufetillo de estrado y dos niños Jesús de bulto.
Unas tarimas de cama.
Todo recado de cocina y peltre.
Todos los que son necesarios para decir
misa con su cáliz.
Ochenta y cinco onzas de plata labrada, como
son cucharas, tenedores, salero, salvilla
tembladera.
Dos laminicas de piedra con santos cristos crucificados.
Un cuadro de Nuestro Padre san Francisco.
Dos tabureticos de vaqueta.
Otras tres de vaqueta.
Un bufete de nogal.
Un bufetico de estrado y un brasero con su copa.
Una casa en la calle de los capuchinos,
la última de mano derecha que sale
del campo.
Todos los cuales dichos bienes y casas son los
que han quedado por fin y muerte de la
dicha doña Mariana Gómez de Salinas.
y juro a Dios y a una cruz en forma de
derecho, no tener noticia hayan quedado más bienes
por dicha fin y muerte; y que los
mencionados en esta escritura y cada que la tenga
hará inventario de ellos y así lo
dijo, otorgó y firmó de su nombre siendo
testigos el capitán don José
Fernández de Arjona, Luis de Bustamante
y Juan Antonio Estroque, vecinos
de Málaga.
Diego García Caldera
escribano público