Juramento y
declaración del
cirujano
En la villa de Ezcaray a los dichos
veinte y ocho de marzo de mil
setecientos y veinte y siete años
ante su merced dicho señor alcalde pareció el
dicho Manuel de Mansilla vecino y
cirujano en ella del cual por ante mí el escribano
tomó y recibió juramento por Dios Nuestro
Señor y a una señal de cruz en forma de
derecho para que so cargo de él declara
verdad sobre lo que contiene dicho auto que el
ha sido leído y habiendo jurado como
se requiere prometió de lo así hacer, y
dijo que desde la noche que se contaron
diez y seis de este mes antes y después
que se le notificó de mandato de dicho señor
alcalde asistiese a la curación de
Francisco García y Bar lo ha ejecutado
diariamente y le ha aplicado los
remedios que le han parecido convenientes según
su arte, el cual dicho García tenía tres
heridas, una en la mejilla izquierda, otra
desde ella hasta el labio de abajo y la otra
en el mismo labio de abajo, las cuales heridas
una de ellas que es la del labio de arriba
la tenía penetrada hasta quitarle un
diente que le fue preciso al que declara darle
tres puntadas, la herida de la mejilla de
un dedo de longitud y la de el labio de
abajo del ámbito de una uña que a estas dos
últimas no tuvo por conveniente el coserlas
y todas tres fueron hechas con
instrumento contundente y de un golpe según reconoce
y todas tres le parece según su arte que
con los remedios que le ha aplicado están ya
casi cicatrizadas en las que por ahora no
reconoce riesgo. Así lo declaró bajo de
dicho juramento ser la verdad sin cosa
en contrario y en ello habiéndosele leído
se afirmó y ratificó y que es de edad
de treinta y ocho años poco más o
menos tiempo y lo firmó y dicho señor alcalde
en fe de ello yo el escribano don José Felipe
Ángel Barrenechea y Frías, Manuel
de Mansilla, ante mí, José de Uralde
Declaración del
cirujano
En la dicha villa, dicho día, mes y año y
ante su merced dicho señor alcalde pareció
dicho Manuel de Mansilla del cual su
merced tomó y recibió juramento por Dios
nuestro señor y a una señal de cruz en
forma de derecho para que so cargo de él,
declarará el estado de las heridas de Francisco García
y Bar, y habiendo jurado como se requiere
prometió de lo así hacer y dijo que
desde que hizo la última declaración a esta
parte no le ha aplicado más remedio que el
que hasta entonces le aplicó y habiéndole
visto y registrado después acá, sabe
que ya tiene las heridas cicatrizadas y
sin riesgo alguno. Así lo declaró bajo
dicho juramento ser la verdad y en ello se
afirmó y ratificó y siendo necesario lo
volvió a declarar de nuevo y que es de edad
de la que antecedentemente tiene
declarada, días más y lo firmó y dicho señor
alcalde y en fe de ello yo el escribano, Ángel,
Manuel de Mansilla, ante mí
José de Uralde