GR1607D9063
Amenazas e insultos de Pedro de Salas, procurador, a Elvira Ortiz, para evitar que esta declare en un juicio
Fecha | 1607 |
Localidad | España, Granada, Loja |
Proyecto | HISPATESD: Hispanae Testium Depositiones. Las declaraciones de testigo en la historia de la lengua española. 1492-1833 |
Financiación | MINECO/AEI/FEDER/UE: FFI2017-83400-P, 2018-2021 |
Archivo | Archivo de la Real Chancillería de Granada |
ID del manuscrito | ARCHGR 9435/64 |
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Por las preguntas siguientes sean examinados los
testigos que fueren presentados por parte de Elvira Ortiz, vecina de la
ciudad de Loja, en el pleito criminal que trata contra Pedro de
Salas, procurador y Francisco de Carvajal, escribano, vecinos de la dicha ciudad:
1 Lo primero si conocen a las partes de este pleito y si tienen
noticia de él y del pleito que la susodicha siguió contra Asensio Muñoz.
2 Ítem si saben que, habiendo llevado la dicha Elvira
Ortiz provisión de su majestad para que fuesen tasadas y
pagadas las costas que la susodicha había pagado a los dichos
Pedro de Salas y Francisco de Carvajal y a otros del pleito que siguió
contra el dicho Asensio Muñoz y, habiendo requerido con ella
y llevando testigos para que depusiesen sobre los
gastos de las dichas costas, el dicho Francisco de Carvajal el viernes
pasado que se contaron treinta de marzo, impidió que
no se hiciese la dicha averiguación, amenazando a los
testigos para que no dijesen lo que sabían, diciéndole
a la dicha Elvira Ortiz de vieja, bellaca, embustera y que si
no lo tuvieran había de poner las manos en ella, y otras
palabras de mucha injuria y afrenta que no caben
en la dicha Elvira Ortiz.
3 Ítem si saben que después de lo susodicho, el sábado
luego siguiente, yendo la dicha Elvira Ortiz a
proseguir a su negocio y presentar testigos en la plaza
pública, el dicho Pedro de Salas, sin causa ni razón alguna,
dijo a la dicha Elvira Ortiz de vieja, bellaca,
embaidora y que le había de cortar la cara, y a los testigos
que dijesen, haciéndoles asimismo otras
amenazas; en todo lo cual afrentaron y injuriaron gravemente
a la dicha Elvira Ortiz, por ser como es mujer muy
honrada, de muy honrados deudos y parientes.
4 Ítem si saben que respecto de las amenazas que
los dichos Pedro de Salas y Francisco de Carvajal hicieron a
los testigos de la dicha Elvira Ortiz, no tuvo efeto
el cumplimiento de la real provisión que la susodicha
llevó para que provase y averiguase las costas que
gastó en el pleito de él a dicho Asensio Muñoz y le fuesen
pagadas, y que los testigos no juraron ni declararon; y así
cesó de probarle lo susodicho y de pagar a la dicha
Elvira Ortiz las dichas costas.
5 Ítem si saben que todo lo susodicho es público y notorio, pública voz y fama.
Pedro de Castro Rodrigo Alonso
Maldonado
3 [1] A la tercera pregunta, dijo que lo que sabe de la pregunta es
que habrá quince días, poco más o menos, que la dicha Elvira Ortiz
habló a esta testigo para que dijese un dicho sobre las costas y gastos
que la susodicha ha hecho en el pleito que trató con Asensio Muñoz,
porque esta testigo sabe que la susodicha vendió muchos bienes
para pagar las costas que gastó. Y así este testigo, juntamente con la dicha
Elvira Ortiz, fue a la plaza pública de la dicha ciudad de Loja
a el escritorio que allí está de Juan Ramírez, escribano, para decir y
declarar lo que sabía acerca de el dicho negocio. Y, estando esta testigo
y la dicha Elvira Ortiz asentadas en el dicho escritorio, vio que
llegó Pedro de Salas, procurador de la dicha ciudad, y allegó a esta testigo
y le descubrió el manto del rostro para la mirar
bajando la cabeza, y le dijo el susodicho a esta testigo que si
era testigo y venía a jurar en el dicho negocio, y respondió esta testigo que
sí, y que juraría lo que sabía. Y luego el dicho Pedro de Salas, procurador,
y la dicha Elvira Ortiz se asieron a palabras, y se acuerda que el
dicho Pedro de Salas, muy enojado, dijo a la dicha Elvira Ortiz:
Vieja bellaca, embustera, habéisme de llevar vos a mí tantos ducados
como os dieron por el virgo de vuestra hija
, y otras muchas
palabras que no se acuerda. Y, como esta testigo los vio con tanta
pasión y enojo, dijo a la dicha Elvira Ortiz que
se fuese de allí, y así esta testigo no dijo ni declaró su dicho
acerca del dicho negocio y costas que le habían llevado. Y esta testigo vio
que la dicha Elvira Ortiz quedó injuriada y agraviada de las
dichas palabras que el dicho Pedro de Salas le dijo, y la
susodicha estaba llorando de que él la hubiese afrentado y dicho
aquellas palabras en presencia de mucha gente. Y la
susodicha se fue llorando a casa de el alcalde mayor a darle cuenta del
dicho negocio que había pasado y palabras que le había dicho
el dicho Pedro de Salas. Y esta testigo se volvió a su casa sin
declarar su dicho. Y que esta testigo sabe que la dicha Elvira Ortiz es mujer
honrada y de muy honrados deudos y parientes en la dicha
ciudad de Loja. Y esto es lo que sabe de esta pregunta.
2 [2] A la segunda pregunta, dijo este testigo que sabe que la dicha Elvira
Ortiz trajo a la dicha ciudad de Loja una real provisión de los señores
alcaldes de el crimen de la Real Chancillería de Granada para que le
fuesen tasadas y pagadas las costas que la susodicha había hecho
y pagado a Pedro de Salas y Francisco de Carvajal y a otros
de el pleito que siguió contra Asensio Muñoz, lo cual sabe
porque vio que requirió con ella a Juan Ramírez, escribano público,
en cuyo oficio este testigo escribe. Y que se acuerda que habrá
quince días, poco más o menos, que el dicho Francisco de Carvajal, escribano,
fue a el oficio de el dicho Juan Ramírez a declarar sobre las costas que la
dicha Elvira Ortiz había pagado enel el dicho pleito. Y la dicha Elvira Ortiz
estaba en el dicho oficio y, después que el dicho Francisco de Carvajal había
declarado que no le había dado nada de costas la dicha Elvira Ortiz,
tuvieron los susodichos palabras de enojo; que solamente
este testigo se acuerda que, por haber dicho el dicho Francisco de Carvajal que
la dicha Elvira Ortiz no le había dado ningunos ducados, la susodicha
dijo que Dios lo sabía y el dicho Francisco de Carvajal, escribano, dijo
a la susodicha: Idos con Dios, que ya os he dicho que mentís
, y
el dicho Juan Ramírez, escribano público de la dicha ciudad, la envió y se
apaciguó. Y se acuerda este testigo que a las dichas palabras
se hallaron Francisco de Navarrete, procurador, y otras personas
muchas que no se acuerda para los declarar. Y esto dice
de la pregunta.
3 A la tercera pregunta, dijo que lo que sabe de la pregunta es
que habrá quince días, poco más o menos, que estando este testigo
en el oficio de Juan Ramírez, escribano público de la dicha ciudad
de Loja, la dicha Elvira Ortiz llevó a una mujer
que declarase sobre las costas e gastos que había tenido en el
pleito contra Asensio Muñoz. Y, estando la susodicha en el
oficio de el susodicho, entró Pedro de Salas, procurador de la dicha ciudad,
y llegó a la dicha mujer que la dicha Elvira Ortiz llevaba
y dijo: ¿Es ella el testigo que viene a jurar?
Y la dicha mujer
dijo que sí era, y el dicho Pedro de Salas dijo a la dicha Elvira
Ortiz: ¿Al fin quiere seguir esto sabiendo que no es verdad?
,
y la dicha Elvira Ortiz respondió Dios sabe si es
verdad, y así Dios le ayudará como juro
. Y el dicho Pedro de Salas
dijo a la dicha Elvira Ortiz palabras de enojo y de
injurias, entre las cuales se acuerda que le dijo que era una
bordonera embustera, y ella respondió que él lo era.
Y el dicho Pedro de Salas, asimismo se acuerda, que le dijo
vos andáis por que os dé de bofetadas y llevarme otro
tanto como llevasteis a el otro por el virgo
falso de vuestra hija
. Y tuvieron otras palabras de enojo
e injurias que este testigo no se acuerda, y con esto el
susodicho se fue. Y que este testigo se acuerda que a las dichas
palabras se hallaron presentes Pedro López,
cuñado de Juan Ramírez, escribano, y Baltasar de Cecilia y otras personas
que no se acuerda. Y esto responde.
2 [3] A la segunda pregunta, dijo que lo que sabe de la pregunta
de que este testigo tiene noticia es que la dicha Elvira Ortiz
trajo la real provisión contenida en la pregunta e requirió con ella a la
justicia de la dicha ciudad por ante Juan Ramírez, escribano público de ella. Y,
habiendo mandado la dicha justicia que declarasen los contenidos en ella, y habiendo
acudido Francisco de Carvajal, escribano público, a el oficio de el dicho Juan
Ramírez a hacer la dicha declaración; y, estándola haciendo, entró la dicha
Elvira Ortiz, y el dicho Francisco de Carvajal dijo a la susodicha
se fuese con Dios y le dejase hacer la declaración, y la
susodicha respondió algunas palabras que este testigo
no se acuerda más de que el dicho Francisco de Carvajal replicó
que la susodicha era una vivandera e mujer de un carnicero,
y que dónde tuvo ella seiscientos reales en toda su vida
de caudal para poderlos dar como ella decía.
Y a esto algunos que estaban presentes le dijeron a la
susodicha que se fuera con Dios, y volvió las espaldas
y se salió de el dicho oficio. Y esto es la verdad
y no sabe otra cosa de la pregunta.
3 [4] A la tercera pregunta, dijo que lo que él sabe de la pregunta que habrá
quince días, poco más o menos, que, estando este testigo en su casa que es en la plaza
pública de la dicha ciudad de Loja, oyó voces en el oficio de Juan Ramírez, escribano público.
Y este testigo salió de su casa que es cerca de el dicho oficio a ver lo que pasaba,
y vio a la dicha Elvira Ortiz y a otra mujer que este testigo no conoció ,
y vio que Pedro de Salas, procurador, estaba tratando mal de palabra
a la dicha Elvira Ortiz, en las cuales se acuerda que el dicho Pedro
de Salas le dijo que era una puta probada embustera,
y que si entraba allá dentro que le había de cortar la
cara; y acometió a entrar en el escritorio del dicho Juan Ramírez
porque estaba fuera en la plaza diciendo las dichas palabras, lo cual
pareció mal a la gente que allí estaba de que dijese las dichas
palabras, y que se acuerda que, cuando el dicho Pedro de Salas dijo
que le había de cortar la cara a la dicha Elvira Ortiz, asimismo
dijo que le había de cortar la cara a quien jurara. Y así
vio este testigo que la dicha Elvira Ortiz se salió del dicho oficio
llorando, diciendo que se había de ir a quien se le hiciese
justicia, pues que allí no la había. Y con ella salió la mujer
que estaba con ella, y esto es lo que sabe e pasó e vio este
testigo, y que tiene a la dicha Elvira Ortiz por mujer honrada
y de honrados deudos e parientes, y por tales son habidos
y tenidos en la dicha ciudad sin haber cosa en contrario. Y esto responde.
Legenda: | Expansión • Conjetura • Tachado • Adición • Restitución • Sic |
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