Leandro de Guevara
su
inventario de bienes
En el nombre de Dios Nuestro Señor, en
la villa de Serón, en veinte y siete días
del mes de octubre de mil
setecientos y quince años, ante mí escribano, juez
y testigos aquí contenidos pareció don Leandro de
Guevara, vecino de esta villa y viudo de doña Juana Quesada
y dijo que al servicio de Dios nuestro señor y con su gracia está
tratado de se desposar y velar según orden de la Santa
Madre Iglesia romana con doña Margarita
en estado de doncella, hija legítima de don Tomás de
y doña Tomasa Pérez, sus padres, vecina que es y fue
de esta dicha villa, ya llegado a efecto el matrimonio
y para ayuda a sustentar las cargas de él, el dicho don
Leandro de Guevara, trae ciertos bienes muebles,
semovientes y raíces por propio caudal suyo, que los dichos bienes
y sus precios son los siguientes:
Diez sillas de moscovia encarnadas en
cuatrocientos y cuarenta reales.
Siete sillas guitadas en treinta reales.
Un escritorio con sus llaves y su pie en
cuatrocientos reales.
Dos camas de pino y una de nogal con sus
tornillos en ciento y treinta reales.
Cuatro colchones fundados de lana y una
cabecera en doscientos reales.
Seis arcas grandes, una pequeña con cuatro
cerraduras, todo en doscientos reales.
Dos cofres, uno grande y otro pequeño con sus
cerraduras en diez ducados.
Dos colchas de colores y dos frezadas
encarnadas en ciento y sesenta reales.
Ocho sábanas, seis de lino y dos de cáñamo,
en ciento y sesenta reales.
Ocho almohadas de lino en treinta reales.
Un bufete de nogal con sus hierros en ocho ducados.
Un bufete de nogal con gaveta y tres
bufetes de pino pequeños en sesenta reales.
Un bufete de pino grande y un escaño en
cincuenta reales.
Un velón, una caldera de hierro grande y otra
caldera menor con una asa menos y un
caldero grande y otro pequeño, una
caldereta y dos peroles, un grande y un
pequeño, todo en quinientos y setenta reales.
Tres cuadros de diferentes pinturas en
ciento y cincuenta reales
Dos sobre mesas y una delantera de
cama de colores en veinte reales.
Dos morillos y dos mazos, grande y un
pequeño, todo en cien reales.
Un badil, unas tenazas y cuatro sartenes,
dos grande y dos pequeñas, un cazo y tres
asadores, unas parrillas y tres espeteras.
Un peso de cruz en ciento y cincuenta reales.
Cinco cueros y dos tinajas en cien reales.
Dos pares de trébedes, dos grandes y dos
pequeñas en treinta reales.
Un espejo grande en veinte reales.
Dos almireces con sus manos en cien reales.
Una artesa, dos tablas y dos tendidos en
cuarenta reales.
Dos romanas, una grande y otra pequeña
en cien reales.
Cinco tablas de manteles grandes y
pequeños y media pieza de servilletas de
lino, todo en doscientos reales.
Un manto de seda nuevo y dos toallas de
lienzo delgado con encajes, todo en
ciento y cincuenta reales.
Seis cucharas de plata, un tenedor, una
tembladera y dos pares de zarcillos de oro,
y otro par de zarcillos de plata
sobredorada, y dos anillos de oro pequeños de
una piedra en cuatrocientos y cincuenta reales.
Dos mulas de labor y una yegua que valen
mil y ochocientos reales.
Veinte y dos cabezas de ganado de cerdo
en mil reales.
Un cantarera, un velador y tres candiles
y unas devanaderas y un bastillo de lino.