ODE

Fecha	1827
Localidad	España, Almería, Cuevas de Almanzora
Proyecto	HISPATESD: Hispanae Testium Depositiones. Las declaraciones de testigo en la historia de la lengua española. 1492-1833
Financiación	MINECO/AEI/FEDER/UE: FFI2017-83400-P, 2018-2021
Archivo	Archivo de la Real Chancillería de Granada
ID del manuscrito	ARCHGR 5204/5
Transcripción	Diego Reinaldos Miñarro
Revisión	Miguel Calderón Campos

Pleito. La justicia de la villa de Cuevas de Almanzora contra Francisco de Rojas Perellón, vecino de la misma villa, sobre insultos a Blas Gázquez Bolea
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		Compa En la billa de las Cuevas, a diez y siete de marzo de mil ochos veinte y siete, siendo como las ocho de la mañana, ante el sor lic d Ysidoro Juez Sarmiento, alcalde mayor de ella, comparecieron Franco Perez Serrano y d Alfonso Marquez Navarro, el primero diputado del pago de Aljarilla y el segundo guarda de campo y huerta de esta villa. Y dixeron que, siendo como las doce de la noche del dia de ayer, diez y seis, se presento en la casa del primero Blas Gazquez Bolea, de esta vecindad, manifestandole se levantase que havian ido a su cortigo Franco de Roxas, alias Jollin, y otro a matarlo. Y con efecto, haviendose levantado, y acompañaba al Gazquez Franco Navarro Marz, y dirigidose los tres a la casa de d Alfonso Marquez, lo llamaron. Y, contadole lo que havia, se marcharon los cuatro a haver si davan con dhos dos hombres, pues que el Gazquez le dijo que el Roxas llevava una pistola grande y el otro un travuco, y que mas le havian quitado de su el chuzo que tenia para guardar

Compa En la billa de las Cuevas, a diez y siete de marzo de mil ochos veinte y siete, siendo como las ocho de la mañana, ante el sor lic d Ysidoro Juez Sarmiento, alcalde mayor de ella, comparecieron Franco Perez Serrano y d Alfonso Marquez Navarro, el primero diputado del pago de Aljarilla y el segundo guarda de campo y huerta de esta villa. Y dixeron que, siendo como las doce de la noche del dia de ayer, diez y seis, se presento en la casa del primero Blas Gazquez Bolea, de esta vecindad, manifestandole se levantase que havian ido a su cortigo Franco de Roxas, alias Jollin, y otro a matarlo. Y con efecto, haviendose levantado, y acompañaba al Gazquez Franco Navarro Marz, y dirigidose los tres a la casa de d Alfonso Marquez, lo llamaron. Y, contadole lo que havia, se marcharon los cuatro a haver si davan con dhos dos hombres, pues que el Gazquez le dijo que el Roxas llevava una pistola grande y el otro un travuco, y que mas le havian quitado de su el chuzo que tenia para guardar su hacienda. Y, haviendo marchado todos quatro, se quedo en su corto el Navarro Marz. Y diciendole los comparecientes al Gazquez les diese norte donde podrian estar los que lo havian querido matar, les señalo la hacienda que labra Jose de Roxas Navarro. Y dirigidose a el en un oyo de planta se encontraron dirimiendo a Pedro de Rojas Navarro y al Franco de Roxas, alias Jollin; y, llamandolos, se pusieron de pie; y, pidiendole los comparecientes al Franco de Roxas el chuzo que havia quitado al Gazquez, se lo dio; y, registrando la cama del Roxas, se encontraron una pistola que, asi esta como el chuzo, hacen presentacion a su merd de ello. Y, al tiempo de ir a echar mano al Roxas para traerlo a la presencia judicial, pego un blinco y, tirandose por un cortado echo a uir. Y ansi quando registraron aquel sitio de nuebo a efecto de ver si podian dar con otra persona o armas, no pudieron conseguirlo; lo que hacian presente a su merd para qe en vista de todo diese las providencias que sean conducentes al castigo de los delincuentes. Y por su merd, vista la anterior comparecencia, mando que, ractificandose en ella los referidos Franco Perez Serrano y D Alfonzo Marquez Navarro, se ponga diligencia por el presente escrivano de la clase de dha pistola y chuzo, como igualmte si aquella se encuentra cargada y si lo esta con bala o municiones; y, verificado asi, recivase declaracion de Blas Gazquez, y con lo que diga se proveera. Y lo firmo dho sor con el Marquez, y no el Perez Serrano porque dijo no saver. De qe yo, el escrno, doy fe. Alfonso Marquez Ldo Ysidoro Juez Sarmiento ante mi, Vicente Anto Hernandez DiligaDiligencia de presentación de las armas ante la justicia. Yo, el escrno, en cumplimto de lo prevenido en la comparecencia que antecede, certifico y doy fe que la pistola que en este auto se ha echo presentacion por Franco Serrano Perez y d Alfonso Marquez lo es de alzon, y al parecer francesa, con media caja y gancho, y sobre el cañon un letrero que dice Regimiento de Calatraba; y sobre la coz dice Cª Nº 7; su llave española, su vaqueta de palo; y, metido el sacatrapos, se vio estava cargada con cartucho, su bala de catorce adarmes, algunos perdigones y muy poca polvora; su cazoleta sin cevo, con su piedra de chispas; y el chuzo: lo es su madera de ginjolero, de una bara de largo, y una cachipora pequeña por donde se agarra, y a su final tiene una punta de yerro que entra en referido palo, el que lo atraviesa para su seguridad un clavo del mismo metal; su largura de dha punta, dos pulgadas. Cuya pistola y chuzo, de mandato del sor ale mayor, quedaron en poder de mi, el escrno. Y para que conste lo firmo con dho sor. Doy fe. Ldo Juez Sarmiento Vicente Ano Hernandez Declaracion de Blas Gazquez Bolea. En la villa de las Cuevas, a diez y siete de marzo de mil ochos veinte y siete, ante el sor lic d Ysidoro Juez Sarmto, alcalde mayor por S M de ella y las demas de su partido, comparecio Blas Gazquez Bolea de esta vecindad, a quien dho sor, por ante mi el escrno, recivio juramto, que lo hizo segun dro. Prometio decir verdad y, siendo preguntado sobre lo que le ocurrio en la noche del dia de ayer y a que hace referencia la anterior comparecencia, dixo: que siendo como las onze de la noche de ella, se hallava en la hacienda de Maria Collado guardando lechugas, y llegando Franco de Roxas, alias Jollin, mudado de ropa con unos pantalones, llamo al tgo, que dice que se levantase. Y, excussandolo, le dijo rezase el credo que hiva a morir, poniendole una pistola montada a los pechos. Cuya accion, vista por el declarante, le dijo que por Dios viera lo que hiva hacer, pues no havia un motivo pues que jamas se havia metido con el; a lo que le contesto el Roxas que no havia remedio, que hiria a tiro echo a matarlo. Y en este intermedio se persono otro hombre, a quien le dijo el Roxas: Marquez, acude; el que lo hizo con su travuco en las manos. Y, matandolo, le dijo al declarante: Puñetero, tiendete que ya ha llegado la hora de tu muerte; quitandole el otro el chuzo que tenia para guardar su hacienda, cuyo hombre del travuco conocio no hera Marquez y si lo hera Jose de Roxas Navarro. Y, visto por el declarante que no havia mas remedio que morir, dio una buelta por la barraca y echo a huir; y el Roxas Navarro lo siguio con el travuco diciendole: Mira que te mato, tiendete. Mas al llegar cerca del cortixo de Franco Navarro Martinez, principio a dar voces: Tio Franco, que me matan, que me matan. A cuyas voces acudio adonde estaba el declarante, y el Jose de Roxas echo a huir por entre unos berdes. Y, contandole lo que ocurria, pasaron ambos a darle cuenta al diputado del pago de Aljarilla, Franco Perez Serrano. Y, llegando a su casa, que esta en esta villa, se le conto lo que ocurria, y todos tres pasaron a ber al guardo de campo d Alfonso Marquez; y todos reunidos pasaron a dho pago de Aljarilla ha ver si encontraban a los que cometieron el atentado. Y llegado al cortixo del Franco Navarro, se quedo este en el, y el declarante con el Marqz, y no se fueron a la hacienda del Jose de Roxas; y, quedandose atras, dijo que sacaron del sitio donde estaban durmiendo Pedro de Roxas y el Franco de Roxas, alias Jollin, una pistola y un chuzo. De lo que dice que se halla en dha choza cuando la ocurrencia Juan Collado Perona, y que lo dho es la berdad en cargo del juramto que tiene prestado, que es de edad de veinte y quatro años. No firmo por no sauer, lo hizo dho sor. Doy fe. Emo que ve . Ldo Juez Sarmiento ante mi Vicente Anto Hernandez Tgo: Franco Navo Marz. En la villa de las Cuevas, en el mismo dia diez y siete de dho mes y año, ante referido sor alce mayor, de citacion del algl ordo Diego Marz, lo hizo Franco Navarro Marz, de esta vecindad, a quien dho sr, por ante mi el esno, recibio juramto, que lo hizo conforme a dro, prometio decir verdad. Y, siendo preguntado por las citas que le resultan, en su inteligencia dixo que, hallandose durmiendo en su cortijo, cito en el pago de Aljarilla, llego de pronto Juan Collado Garcia diciendo acelerado: Tio Franco, levantese V por Dios, que matan a mi primo. Con este motivo salio el declarante de la cama, y al salir oyo una voz que dijo: Tio Franco, que me matan, que me matan, ladrones. Y de pronto cercarse Blas Gazquez Volea, el que sin poder respirar le manifesto que dos hombres, el uno con una pistola y el otro con un trabuco, lo habian querido matar. Con este motivo se fueron por todo el pago registrando y, llegando a la choza del Blaz, observo que le habian quitado el chuzo, con cuyo motivo vinieron a esta villa. Y, llamando al diputado del pago, Franco Perez Serrano, se levanto y, pasando a la casa del guarda de campo d Alfonso Marquez, hasiendolo este tambien se fueron todos reunidos a buscar a los picaros. Y, llegando a la hasienda del declarante, se quedo en ella, y los demas siguieron sin que el tgo haya sabido el resultado. Y que lo dho es la verdad en cargo del juramto prestado, que es de edad de cincuenta y dos años. No firmo porque dijo no saber, lo hizo dho sr. Doy fee. Ldo Juez Sarmiento ante mi Vicente Anto Hernandez . Tgo citado Decn de Juan Collado Garcia Seguidamte, de la misma citacion ante el referido sr alce mayor, comparecio Juan Collado Garcia, alias Perona, de esta uecindad, a quien dho sor, por ante mi el esno, recibio juramto, que lo hizo conforme a dro. Prometio decir verdad y, siendo preguntado por las citas que le hacen Blas Gazquez y Franco Navarro, en su inteligencia dixo que, siendo como las once o las doze de la noche pasada, se hallaba el tgo con su primo Blas Gazquez Volea durmiendo en la choza de la hacienda que guarda de Maria Collado. Y, de pronto, sintieron que llamaba un hombre, y dispertando el Blas y declarante vieron a Franco de Rojas, alias Jollin, mudado de ropa con unos pantalones; y, diciendole el Rojas al Gazquez montando una pistola: Resa el credo que bas a morir; le contesto que por Dios viera lo que iba hacer. Lo que, visto por el declarante, y que se presento otro hombre, como pudo se escapo. Y, hechando a correr, llego al cortijo de Franco Navarro Marz, y llamando a este se levanto, y a esto ya venia el Blas Gazquez dando vozes diciendo: Tio Franco, qe me matan, ladrones. Y con este motivo registraron el pago y, no encontrando a nadie, solo hecharon menos de la choza el chuzo qe tenian para guardar la hazienda. Y que lo dho es la uerdad en cargo del juramto qe tiene prestado, que es de edad de diez y ocho años. No firmo porque dijo no saber. Lo hizo dho sr. Doy fee. Ldo Juez Sarmiento ante mi Vicente Anto Hernandez Declaron de un hombre prezo. Seguidamte, permaneciendo dho sor alcalde mayor en las rs carceles y sala audiencia, hizo comparecer ante si a un hombre preso por esta causa, a quien, por ante mi el escrno, recivio juramto, que lo hizo segun drho. Prometio decir verdad, y a las preguntas que se le hicieron, a cada una respondio lo sige: A la ordinaria, dixo llamarse Jose de Roxas Navarro, natural y vecino de esta villa, de estado casado, de exercicio ortelano, y de edad de ueinte y seis años, y responde. Preguntado quien lo prendio, por que causa o si la presume, dixo que lo prendio d Franco Arquez Navarro, teniente algualil mayor, ignorando la causa, y responde. Preguntado donde estuvo la noche del diez y seis del actual, con quien se acompaño y que lo ocurrio, dixo que estuvo en el cortixo de su padre, y que solo se acompaño con Pedro Navarro, el hijo de Greña, y que no le ocurrio cosa alguna, y responde. Preguntado si estuvo con su hermano Pedro, hasta que hora de dha noche, donde aconstumbra el declarante a dormir, dixo que en el momento que oscurecio, y despues de haver cenado juntos con el Pedro Navarro, invio el declarante a dho su hermano a qe durmiese en el oyo de la hacienda que cultiva el declarante, porque temprano tenia que marcharse a la Ballagona por un poco de sirre, y que la constumbre que tiene de dormir lo es en dho oyo, y responde. Preguntado si conoce a Franco de Roxas Perellon, alias Jollin, que tiempo hace le acompaño y con que obgeto, dixo que conoce al Franco de Roxas, y que desde antes del carnaval no lo ha visto ni hablado, y que el obgeto de su reunion, es que como primos se saludaban, y responde. Preguntado si conoce a Blas Gazquez Bolea, si en algun tiempo ha tenido incomodidad con el, y donde havita este, dixo que conoce a Blas Blazquez, y que quando tuvo una incomodidad con su tio, que le acompaño, con el jamas se la motivo; y que havita un poco mas bajo del cortixo de su padre, en una hacienda que guarda, y responde. Preguntado si tiene noticia del insulto que se le cometio al Blas Gazquez la noche del diez y seis que ya ba referida, dixo que, acostado con el Pedro Navarro en el cortixo mencionado, sintio la voz del Gazqz que decia: Ladrones, ladrones. Que enseguida paso por dho cortixo Jose, hijo de Juan Ramon el hermitaño, que hiva a echar agua, y estuvo parado hablando de los riegos, y responde. Tgo: Pedro Navarro Navarro, alias el hijo de Greñas. En la villa de las Cuevas, a veinte y siete de marzo de mil ochocs veinte y siete, de comparesencia del algl ordinario Diego Marz ante el sr alce mayor, lo hizo Pedro Navarro Navarro, entendido por el hijo de Greñas, a quien dho sr, por ante mi el escno, recibio juramento, que lo hizo conforme a dro. Prometio decir verdad y, siendo preguntado al tenor de la cita que le resulta, en su inteligencia dixo que, con motivo de tener un poco de verde en la hacienda de Pedro de Rojas Quijano, se hallaba en ella el tgo, y tiene bien presente que desde el obscurecer del dia diez y seis hasta el diez y siete por la mañana no se separo del lado del tgo Jose de Rojas Navarro; haciendo memoria tambien que, estando ambos durmiendo juntos, a la media noche sintieron unas voces que decian: Ladrones, ladrones. El que tambien iba diciendo: Pensaran no los he conocido, Frasquito Jollin y Marquez. Que en este intermedio paso por dha hacienda Jose Collado Castellon, el hijo del hermitaño del sepulcro y, parandose en el cortijo donde estaba el tgo y el Jose de Rojas, estubo ablando con este acerca de las aguas, que las habian bolcado. Y que lo dho es la verdad en cargo del juramto que tiene prestado, que es de edad de diez y ocho años. No firmo porque dijo no saber, lo hizo dho sr. Doy fee. Ldo Juez Sarmiento ante mi Vicente Anto Hernandez . Tgo: Jose Marz Castellon, entendido por el hijo de Juan Ramon, el hermitaño del sepulcro. En la villa de las Cuevas, a veinte y ocho de marzo de mil ochocs veinte y siete. De la propia citacion ante el sr alce mayor comparecio Jose Mars Castellon, de esta vecindad, a quien dho sr, por ante mi el esno, recibio juramto, que lo hizo conforme a dro. Prometio decir verdad y, siendo preguntado sobre las citas que le resultan, en su inteligencia dixo que en la noche del diez y seis del actual, habiendole faltado el agua para regar su hacienda por haberla cortado el aciequero, paso el tgo a buscar a este para ello; y, pasando por el cortijo de Pedro de Rojas Quinano, vio estaban tendidos en ella Jose de Rojas Navarro y y Pedro Navarro Navarro. Y el tgo estubo ablando con el Jose acerca de las aguas, y en esto oyeron unas voces que decian: Ladrones, ladros; mas no volviendolas a repetir fue el tgo a qe hechasen dha agua, como lo executaron. Y al regreso le pregunto al Jose que que habia sido aquellas voces, el que le dijo que Blas Gazquez, a quien abia conocido por la voz, iba diciendo: Pensaran qe no los he conocido, Franco, el hijo de la Jollina, y Marquez. Y, sin otra cosa, se fue el tgo a regar su hacienda. Y que lo dho es la verdad en cargo del juramto prestado, que es de edad de treinta años. No firmo porque dijo no saber, lo hizo dho sr. Doy fee. Ldo Juez Sarmiento ante mi Vicente Anto Hernandez

Pleito. La justicia de la villa de Cuevas de Almanzora contra Francisco de Rojas Perellón, vecino de la misma villa, sobre insultos a Blas Gázquez Bolea