ODE

Fecha	1600
Localidad	España, Valladolid, Mucientes
Proyecto	VIVE. Vita Verborum. Los peritajes de las Chancillerías castellanas en la historia del español (1650 - 1833)
Financiación	Ministerio de Ciencia e Innovación. Proyectos de Generación de Conocimiento 2022. PID2022-136256NB-I00
Archivo	Archivo de la Real Chancillería de Valladolid
ID del manuscrito	ARCHV Pleitos civiles, Fernando Alonso (F), caja 1474,6
Transcripción	Diego Antonio Reinaldos Miñarro

Copia coetánea de declaración de Bartolomé Hernández, esclavo del obispo D. Diego de la Calzada, sobre las heridas propinadas a Juana de Herrera, hija de Martín de Herrera, presentada en el pleito de 1600-1602 que sigue este contra Cristóbal de Hornazo, alguacil de la villa, por negligencia al dejar escapar de la cárcel a dicho esclavo
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Confisio: En la uilla de Muçientes, a doçe del mes de setienbre de mill y seysçientos años, el señor alcalde, Pedro Barigo, por ante mi, el presente hescriuano, fue a la carzel publica de sta uilla ha hazer bisita de carzel, donde hallo presos dos onbres por çierto delito de que son acusados, el uno d ellos que allo yzo poner e apartar a un aparte y del hotro tomo e reçibio juramento en forma de derecho y le yzo cunplidamente e prometio de deçir verdad. Y auiendo jurado en forma le yço las preguntas siguientes: Preguntado como se llama y de adonde hes veçino, que ofiçio y edad tiene, dixo que se llama Yglesia. Fue rrepreguntado que nonbre de pila tiene e que sobrenonbre y conforme a la pregunta de harriba volbio ha deçir que se llama Yglesia. Preguntado si heste confesante hes hesclauo sujeto ha servidunvre y si es cristiano vautizado y adonde se bautiço si saue u hoyo deçir y quienes fueron sus padrinos, dixo que ste confesante hes hesclauo sujeto a seruidunbre y que s esclabo de liçençiado Diego de la Calzada, obispo de Solona, y que s cristiano vauticado en la fee de Cristo, y que se batizo en la yglesia de San Ysidro en el arraual de Toledo abra tiepo de doçe haños, que no saue quienes fueron sus padrinos; y esto rresponde. Preguntado si es berdad que ste confesante reside hal presente en esta uilla en casa de Leandro de la Calzada, alcalde mayor d ella, sobrino del dho obispo, su hamo, dixo que lo confiesa como se le a preguntado. Preguntado si hes vdad que uiniendo este confesante en conpania de Juan Redondo, criado del dho Leandro de la Calzada, alcalde mayor dicho, el lunes pasado que se contaron quatro dias d este mes y año por la rronda que va ha dar a casa del dho Leadro de la Calzada y encontraron en el camino a Françisco, criado de Handres Hescudero, el qual hestaua cauallero en una carreta donde hauia descargado paja, que en el auia en vn pajar que staua en la dha rronda, al qual dho Françisco heste confesante le dijo: ¡Qué hermosote rreo! Otras posibles lectura son ¡qué hermoso te ueo!, ¡qué hermoso torreo!, ¡qué hermoso torveo! o ¡qué hermoso torvo!. A lo qual hel susodho le respondyo ha este confese que nunca de buen cristiano buen moro. Y este confesante, hazelerado y lleno de yra y colera quiso arremeter con el para dalle de golpes a su boluntad, a lo qual Santiago Quaxada, que pa la sazon hestaua presente, lo despartio poniendose por medio. Y porque este confesante no se queria apaçiguar, el dho Françisco, criado del dho Andres Hescudero, le dixo a este confesante: ¿Pues que no soys moro y muy moro?, a lo qual heste confesante se deshasio del dho Santiago Quaxada y tomo un canto grande, el qual tiro hal dho Françisco y no le hazerto y dio con el en la carreta donde hestaua cauallero y de alli salto a la pared y bolvio a saltar con el gran golpe y fuerça con que yba y dio a una muchacha, hija de Martin de Herrera, querellante, de hedad de seys años poco mas o menos, a la qual hazerto en la caveza y la descalabro muy mal, ronpiendola cuero y carne, açiendole una gran herida, de que sta muy mala en la cama y a punto de muerte: dixo que confiesa lo que se le a preguntado, pero que como conesta de la pregunta que se le a preguntado heste confesante no lo quiso hazer y su disinio no fue dar a la dha muchacha, por no tener culpa de su pendençia, de que le pesa en l alma. Y esto rresponde. Preguntado si es vdad que por este confesante, uisto que habia fecho el mal recado que tiene confesado se fue a retraer al zyminterio de la yglesia de San Pedro d esta uilla, donde hestubo algun rato asta tanto que l señor alcalde, Pedro Barrigon, que le tomase hesta confision, le fue a prender co jente que para ello llevaba, dixo que lo confiesa como se le a preguntado. Preguntado si es berdad que al tienpo que el dho señor alcalde prendio ha este confesante por la dha herida heste confesante hestava detras de la yglesia, enfrente de la casa de Jua Vaca y Sebastian Uaca y a la dha saçon heste confesante hestaua desbiado de la pared de la yglesia y de los arrimos d ella, de manera que no hera sagrado donde hestaua, dijo que s berdad que l dho señor alcalde le prendio detras de la dha yglesia y que donde le prendio hera sagrado y lo demas niega. Y esto rresponde. Preguntado si es berdad que al tienpo que el dho señor alcalde mando ha Antolin Sanchez y Pedro de Herrera que prendiesen ha este confesante por el dho negoçio heste confesante dixo que hel se yria con ellos a la carzel, que no auia para que le prender, dixo que lo confiesa como se le a preguntado. Preguntado si es berdad que al tienpo que llebaron a la carzel a este confesante y le sacaron de henfrente de la yglesia a heste confesae no se no se rresistio porque hestaua en sagrado, sino que este confesante de su voluntad se fue con los dhos Antolin Sanchez y Pedro de Herrera a la carzel donde hesta dixo que s berdad que el al dho tienpo no pidio la fuerza de sacalle de la yglesia y sagrado donde hestaua porque el dho señor alcalde dixo a bozes que hera berdad que le sacaba de sagrado, y que sto hes la vdad. Y dixo ser de beynte años y, atento la menoridad, pidio por su curador ad liten a Françisco de la Calzada, en presençia del qual se le volbio a leher la dha su confision y, abiendola hoydo y entendido lo en ella contenido se rratifico en ella en presençia del dho su curador ad liten, el qual lo firmo. Y no firmo este confesante por no saber ni el dho señor alcalde. Françisco de la Calzada. Ante mi, Josepe de Nabeda.