MA1750D9036

Probanza. El fiscal contra Diego Cano, preso en la cárcel de Málaga, sobre las heridas y muertes dadas a Juan Bautista Francés y Diego Covaleda, vecino de Málaga

Fecha1750
LocalidadEspaña, Málaga, Málaga
ProyectoHISPATESD: Hispanae Testium Depositiones. Las declaraciones de testigo en la historia de la lengua española. 1492-1833
FinanciaciónMINECO/AEI/FEDER/UE: FFI2017-83400-P, 2018-2021
ArchivoArchivo de la Real Chancillería de Granada
ID del manuscritoARCHGR 10464/3
TranscripciónDiego Reinaldos Miñarro
RevisiónMiguel Calderón Campos

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A la segunda pregunta, dixo saue mui bien que sin constarle a Manuel Antonio Covaleda si Diego Cano hauia sido el que hauia dado muerte a Diego Coualeda, su hixo, lo hauia vociferado y declarado ser cierto. Por lo qual, y conoziendo el castigo que Dios N Sr le imbiaua, pues estando passando dezentemente y qe se veia cada dia mas atrasado y perdido, dispuso confesar. Y, hauiendolo hecho, despues paso a casas de la testigo mui triste y apesadumbrado, diciendo: Que me espanto de lo que me sucede, quando yo tengo la culpa de quantos trauajos ha pasado, pasa y pasara Diego Cano. Y que el confesor le hauia mandado, si queria que lo absoluiesen, que pasase a pedirle perdon, lo qe ejecuto. A la segunda pregunta, dixo es cierto que Manuel Antonio Coualeda, vecino d esta ciudad, oy ausente, y padre de Diego, defunto, ha expresado publicamente y declarado que Diego Cano hauia sido el matador de dho Diego Covaleda, y que, auiendose ydo a confesar, no lo hauia el confesor querido absoluer sin que primero le pidiese perdon a dho Cano. Lo que saue no tan solo por hauerselo oydo dezir a dho Manuel sino porque, estando el testigo preso en la carcel d esta dha ciudad, paso el referido a ella. Y auiendo preguntado pr el zitado Cano, y este salido a ver quien era el que lo buscaba, se encontro con dho Manuel, quien a presencia del testigo le dixo a dho Cano: Todos los hombres herramos, yo pr ver la amistad que Vm tenia con Diego, mi hixo, y con la pesadumbre q su muerte me causo es cierto me presumi y ciertamte asegure ser Vm quien le hauia dado muerte. Pero auiendo ydo a confesarme, y contado lo q es cierto, el confesor no me ha querido absoluer sin que a Vm le pida perdon. Y io, viendolo cierto y conoziendo la quenta que a Dios tengo de dar, cumpliendo con la obligazion de christiano y deseando solo la salvacion de mi alma, lo ejecuto pidiendo a Vm por el amor de Dios me perdone, y lleue con paciencia los trauajos q pr mi culpa padece. Con cuyas razones, y viendo q no tan solo el Manuel, sino el Cano, se entristezieron mucho a presencia del testigo, se retiro dho Coualeda. Y el zitado Cano le dijo: Solo Dios todopoderoso sea el que nos ampare, y de Vm tenga misericordia, y rde. A la terzera pregunta, dixo que con el motiuo de que la noche en que mataron a Diego Coualeda se hallaua el testigo en la esquina de la calle que dicen del Perchel, de la que auiendose retirado y idose vn rato a pasear encontro no Obsérvese esta peculiar grafía para representar lo que entendemos que es una z haze memoria en que sitio a Diego Cano, a quien hauiendo hablado y saludadose le pregunto el testigo al referido que donde yva, a lo que le respondio: Boy a velar porque acavo de retirarme de con vnos amigos, y ia es tarde y siento no me ponga el maestro mala chara. Y, auiendo sacado la combersacion de la muerte, dho Cano se despidio diziendole: He oydo decir, hallandome en casas de Maria Carmona, y despues de hauer salido de ellas, han muerto a uno en el barrio; pr la mañana se sabra. Mediante cuias razones se presume y tiene pr cierto q, quando suzedio dha muerte, se hallaua el Diego Cano, a quien se le acomula, en las casas de dha Maria, y por consiguiente que el referido no fue el matador. Lo que saue pr dhas razones y prque despues en muchos dias se mantubo en esta dha ciudad sin rezelo ni temor alguno, y oio decir publicamte lo que dexa expuesto, y rde. A la segunda pregunta, dixo es cierto que Manl Antonio Covaleda, vezino d esta ciud, y al presente ausente de ella, paso a la carzel. Y auiendo preguntado por Diego Cano, y este salido a ver quien lo buscaua, se encontro con dho Covaleda, quien con palabras de mucho sentimto le dixo a dho Cano: vengo a pedir a Vm perdon de todo corazon por el grande perjuicio que le he hecho y hago, porque es cierto que io he dicho publicamte y declarado judizialmte q Vm fue quien dio muerte a mi hixo Diego, en lo que he procedido con passion. Y prque mediante lo que Vm no ignora, y amistad tan estrecha que Vm tenia con dicho mi hixo, me lo presumio, y auiendo ydo a confesarme no me han querido absoluer respecto a que dixe la verdad sin que primero Vm me perdonase. Y io, conoziendo mi hierro y prque Dios de mi tenga misericordia, lo ejecuto y me arrepiento de veras. A lo que el dho Cano estubo mui atento y, mirandose vno a otro con los semblantes mui tristes, el que le respondio: Yo perdono a Vm para aqui y pa delante de Dios, a qn pido nos ampare. Lo que saue con el motiuo de ser y hauer sido tal thente de alcayde, y pr hauerlo uisto ser y pasar asi, y rde.

Legenda:

Expansión • ConjeturaTachado • AdiciónRestitución • Sic


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