de los dhos rreales de a ocho en rreales de a quatro.
Y, auiendose ido el dho Diego de Pauia de la dha carniceria,
sospechando este to que que podia ser que siendo
honbre rrico el dho Dio de Pauia se deshiciese de los
rreales de a ocho y pidiese de a quatro y quartos, le di
xo este to a el dho Joan Lopez, cortador, la dha sospe
cha que tenia, diciendole: Siendo este honbre
rrico y que trata en la placa, y tan sauido como
seria de los rreales de a ocho y los trueca por de
a quatro y quartos, si es que no balen
. Y el dho
Joan Lopes rrespondio que no sauia nada.
Y, saliendo este to el dho dia de la dha carnizeria,
la muger de Gregorio Munoz, cordonero y especiero,
le dixo a este to que si auia tomado carne en la
carniceria, y este to le dixo que ya la auia to
mado. Y entonçes le dixo este to que si te
nia algunos rreales de a ocho, y la dha muger del dho
Gregorio Muñoz le dixo que por que se lo pre
guntaua. Y este to le dixo que porque
auia uisto que Dio de Pauia se andaua desha
ciendo de rreales de a ocho y trocandolos, y
qu este to le auia trocado dos o tres y en
la carniceria le auia trocado Jua Lopez,
cortador, otros dos rreales de a ocho. Y eston
zes le dixo a este to: Sin duda que no
deuen de baler rreales de a ocho en Granada,
pues los trueca el dho Diego de Pauia
. Y la
dha muger del dho Grego Muñoz le dixo:
Tanbien yo le e trocado otro
, y se lo en
seno a este to, y como este to uio qu el dho
Diego de Pauia se deshacia de los dhos rre
ales de a ocho, a cauo de algunos dias ffue
a la dha carniceria de la dha ciud y le dixo a el dho
Joan Lopez, cortador, que le trocase los dhos
dos rreales o tres de a ocho, los quales e
ran los que le auia dado el dho Dio de Pauia.
Y el dho Juan Lopez se los troco en quartos
porqu este to yba a comprar harina y no pagar
en plata al harriero. Y esto es lo que saue
de lo contenido en la dha pregta, y lo demas en e
llas contenido no lo saue, ni tanpoco este to
saue que los dhos rreales de a ocho que troco el dho
Diego de Pauia eran falsos o no, ni tubo sospe
cha otra sospecha de las de la que te dha, que
no deuian de valer en Granada pues los trocaua
el dho Diego de Pauia.