Yo, el ynfrascripto essno de S M, puco en sus
reynos y señorios y del numero perpetuo d es
ta ciud, doy fee que, siendo entre onze y doze de
la noche de oy, domingo tres de agostto de mill
setezos zinquenta y zinco aos, estando el preste
esno en la cassa de su morada, llego a ella el
señor dn Pablo Cortes de Vargas, alce maor del
crimen d esta dha ciud, y un hombre que ex
preso llamarse Gabriel Guixarro, de ofi
zio quinquillero, que viue frente de la voca
calle de Zafarrayas, hazia las tapias de Sn
Geronimo, expresando havia dado noti
zia a dho señor como en dho sitio havia
unos hombres con armas en las manos
y una quimera vien grande, de que podia
resultar alguna desgrazia. Y por esta
razon havia hido a buscar a su merzed
a su casa, qn me mando le asistiese para
este efecto. Y, haviendo hido hazia dho si
tio, en el camino se encontro a Jph To
ledo, algl ordinario, y dho señor le mando
le asistiese. Y, haviendo llegado al sitio
de la cassa del que a comparezido, se
allo diferentes mujeres como albo
rotadas, y a un hombre que le nombra
ron Ysidro de Torres, maro de hazer
coches, vezino ynmediato. Se le allo con una
espada ancha desembainada en la mano,
con palabras de alboroto, y la vaina meti
da en un briacu, zeñido este en el sitio
que es costumbre por vajo de la zintu
ra. Y haviendosela mandado quitar dho
señor juez, y asegurar, se la saco de
la mano dho alguazil, y la recojio