dura y el lobo en un rrepostero, y un guadameçi
bueno, dos mesas de bordo y un bufete pequeño
y quatro sillas, las dos buenas y las otras dos
viejas, ocho tinajas de azeite, entre grandes y pe
queñas, una media cama de madera,
un almirez grande con su mano y dos candeleros
de azofar.
No me quedo deuer ninguna cosa, si pareçiere yo
deuer algo, se pague y, lo que se me deuiere, se co
bre por mis erederos.
Mando se de limosna a las hermitas acostum
bradas d esta çiudad, a cada una d ellas medio rre
al, y uno para la casa sancta de Jerusalen y, o
tro, para rredençion de cautiuos y, otro, para la
cera del sanctisimo sacramento, esto por una
vez, por ganar los perdones.
Nombro por mis albazeas y testamentarios,
para cumplir y executar este mi testamen
to, a el dicho Andres Gomez Garçia, mi sobrino,
y al padre fray Juan Fernandez de la orden del Se
ñor Sancto Domingo, su cuñado, y a Diego Mar
tin Sequera, escriuano del numero d esta
çiudad y vezinos d ella, a los quales y a cada
uno, yn solidun, doy el poder que se rrequiere
para que de los dichos mis bienes cumplan
este mi testamento, aunque sea pasado el
año del albazeazgo, y uendiendo para ello
los nesesarios en publica almoneda u fuera d ella y sin que sea nesesario liçençia de
ningun juez ni perlado.
Y, cumplido y pagado este dicho mi testamen
cto, en el rremaniente que ansi quedare de